Inma Chacón (hermana gemela de la fallecida escritora Dulce Chacón) se aventuró en el mundo literario a petición de su hermana y poco a poco ha destacado al margen de su sombra. El libro que comentamos hoy fue finalista del Premio Planeta 2011 (desde aquí cuestiono el criterio que siguen para la concesión de este premio). Nos centramos en el libro. Se promocionó como libro de temática “saga familiar”, pero en realidad se centra en la vida de tres hermanas aunque refiere tangencialmente la historia de sus predecesores y las circunstancias que las llevaron a vivir en Toledo y Madrid después de su estancia en Filipinas y Alejandría.
La novela
arranca en el lecho de muerte de María Francisca, a la que todos conocen como
Xisca, única heredera del marquesado de Sotomayor y que está agonizando a causa
de una tuberculosis. Sus últimas palabras van dedicadas a sus hijos, por quienes
clama continuamente ante la atenta y desconcertada mirada de sus dos tías,
Munda y Alejandra y de su madre, Mariana, actual duquesa de Sotomayor. Ninguno
de los presentes en la habitación sabe de la existencia de esos niños, Xisca
nunca ha tenido descendencia, pero ante la petición que hace a su tía Munda de
que los encuentre, ésta acaba convencida de que su sobrina no miente.
La única que
puede tener una explicación es su madre, Mariana, pero se mantiene impasible
asegurando que las palabras de su hija son alucinaciones y delirios causados
por la cercanía de su muerte. Sin embargo, sus tías creen en las palabras de
Xisca y comienzan una búsqueda con el único objetivo de dar con esos niños. Es
así como iremos descubriendo por un
lado la historia de las tres hermanas Camp de la Cruz quienes regresan a
España procedentes de Filipinas, asumiendo Mariana, la hermana mayor, el ducado
de Sotomayor tras morir su padre en el barco que les trae de regreso y por otro
lado, la verdad que se oculta detrás
del encargo realizado por Xisca a sus tías antes de morir, que las
llevará a investigar si realmente existieron esos niños y en su caso, qué ha
sido de ellos.
La acción
transcurre a finales del siglo XIX y principios del XX, un periodo de
grandes cambios, especialmente en lo que al papel de la mujer y los
trabajadores se refiere.
La masonería es
otro de los temas tratados en el libro. Hay múltiples detalles sobre la misma
que nos ayudan a profundizar en este tema y ampliar conocimientos, como su
origen o la ceremonia de iniciación. Es un movimiento que también recibe la
influencia de la sociedad y por lo tanto no acepta que las mujeres entren en sus logias, ya que considera
que ellas no son libres y su condición femenina les impide mantener el secreto
de los símbolos y los rituales en los que se asienta la masonería. Solamente se
admitían logias femeninas de adopción, supeditadas a un adoptante masculino,
que apartaban a las mujeres de las funciones públicas. La mujer en la masonería
seguía siendo un individuo subordinado, tutelado y segregado.
En resumen, se
puede encuadrar dentro del género de novela histórica por el contexto pero… hay
que tener en cuenta también que el amor está presente de principio a fin y es
uno de los hilos argumentales de la narración por lo que no sería descabellado
encajarla igualmente dentro de las novelas románticas.